Cada fin de año se renueva las frases de buenos deseos,
para el nuevo año que está por comenzar, aunque por la fuerza de la costumbre
las palabras se conviertan en frases hechas con mensajes que encierran
profundos anhelos y esperanzas, innumerables propósitos, objetivos y proyectos,
metas por realizar y la vida que reclama que redobles tu apuesta y vayas por
más.
Hay quienes disfrutan de las fechas de fin de año y
año nuevo y las esperan con ansias, otros en cambio, las detestan y sólo
esperan que acaben pronto. En el fondo, ambas posturas apelan a frases hechas,
tanto para expresar sus expectativas, más o menos ocultas, como para reavivar
sus más íntimos anhelos y propósitos.
Al despedir el año que se va y recibir
el año que viene, vale la pena entender que no es que nos irá
bien por el mero hecho de cumplir con toda una ritualidad supersticiosa,
sino por el grado de fe, confianza y obediencia
que pongamos en el único rector de nuestro destino: “Dios” El tiene en sus manos el plano, las llaves y
el manual de manejo de nuestra vida, sin cuyo permiso, nada podrá ocurrir.
No dejemos entonces que el bullicio y la euforia del 31
nos enajene, al punto de olvidarnos de renovar el compromiso con el
Señor, de seguirnos entregando a su santa
voluntad; así como pedirle que nos regale grandes porciones de salud,
amor, fe, paz interior, sabiduría y prosperidad, para
nosotros y hacer un mundo más humano y solidario.
En cualquier caso, lo que no ha de faltar nunca y
especialmente para fin de año, son las metas y proyectos, que sembrarán tu
agenda del nuevo año de frases de esperanza, el mejor motor para convertir
todos tus deseos en realidad. Un nuevo año está por comenzar, les deseo que
esté lleno de propósitos. Recuerda que lograrlos, dependerá en mucho de ti.
Por: Tania Encalada
28 de diciembre del 2012
encaladatania@yahoo.com